David y Sandra son de esas parejas que desprenden una energía especial. Desde el primer momento que nos vimos supimos que íbamos a conectar muy bien en su boda. Tenían claro que para su boda querían lo mejor para sus invitados, familia, amigos y resto del concilio… por eso estuvimos todos juntos en el Castell de Tamarit, un lugar excepcional.

Fue una boda llena de emociones, donde no faltaron anécdotas, como cuando se perdió un anillo en la ceremonia. La niña que lo llevaba estaba tan contenta que hizo que saliera despedido…

Os dejamos un resumen que proyectamos el mismo día de la boda, el vídeo Same Day Edit.