Con Eva y Abraham fue todo muy mágico.  Si he de seros sincero la primera vez que quedamos con ellos no pensamos que viviríamos una boda tan emotiva.  Pero los dos son todo corazón y era fácil reír o llorar.  Las emociones estuvieron a flor de piel, y fue increíble poder capturar y vivir todos aquellos momentos.  Sois una pareja increíble, y no nos dejásteis de sorprender en ningún momento.